COSTA ALCALÁ
HEDERA NO ES UNA ASESINA.
Una ladrona, una tejesombras, una decepción para su familia, sí.Sin embargo, alguien ha matado al hombre más poderoso deu00a0Lydos, que casualmente también es el padre de Tulio, su primer amor.Y TODOS LOS DEDOS LA SEÑALAN A ELLA.
La única salida que le queda es aceptar la ayuda de la tripulaciónu00a0del Buen Padre, el barco-teatro amarrado en el barrio del Errante,u00a0sin saber que son mucho más que una simple compañíau00a0de artistas y saltimbanquis.Un amor truncado.Un romance prohibido.Un Arte y un Don.Dan vida.Pero también la destruyen.u00a0